por Mauricio González
maurigs at geekmagazine.mx
Han transcurrido más de diez años desde que Mark Zuckerberg anunció la compra de Oculus y comenzó a trazar su visión del ‘metaverso’. Sin embargo, este concepto no ganó notoriedad hasta 2021, cuando Facebook, Inc. se convirtió en Meta Platforms, Inc. La división Reality Labs, que dirige esta iniciativa, está a punto de gastar 100.000 millones de dólares. Aún falta tiempo para que se conviertan en realidad los ambiciosos planes de crear mundos virtuales extraordinarios.
Las gafas de realidad virtual y mixta, como las Meta Quest Pro, Meta Quest 3 y Apple Vision Pro, son la puerta de entrada a este tipo de experiencias. Sin embargo, estos dispositivos aún no son lo suficientemente potentes, ligeros y asequibles para ganar aceptación entre el público general. Tim Cook mencionó el año pasado que sus gafas son “un producto de adopción temprana” destinado a “las personas que quieren tener la tecnología del mañana hoy”. Todavía queda un largo camino por recorrer.
Meta: Innovación y Desafíos en la Realidad Virtual
A lo largo del periodo comprendido entre 2014 y 2024, Meta ha destinado más de 80.000 millones de dólares a sus proyectos de realidad virtual y aumentada. Los informes financieros indican un gasto de 19.875 millones de dólares y unos ingresos de 2.146 millones de dólares durante el año pasado. La división Reality Labs concluyó 2024 con un déficit de 17.729 millones de dólares. A pesar de estas pérdidas, Meta sigue comprometida con su visión a largo plazo. La empresa continúa invirtiendo recursos significativos en la realidad virtual y aumentada.
En lugar de disminuir su impulso, el gigante de las redes sociales sigue firme en su convicción de que este es el camino correcto. Espera que en 2025 haya más inversiones y más pérdidas en Reality Labs. Pocas empresas en el mundo pueden permitirse apuestas tan a largo plazo. Meta, sin duda, es una de ellas. En 2024, registró ganancias netas de 87.109 millones de dólares en Family of Apps (FoA). Este segmento incluye productos y servicios como Facebook, Instagram, Messenger y WhatsApp. Estas cifras demuestran la capacidad de Meta para equilibrar inversiones audaces con ganancias sustanciales en otras áreas de su negocio.
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Reality Labs no solo se vincula estrechamente con el metaverso, sino que también tiene un alcance mucho más amplio. Esta división es el centro de productos comerciales relativamente exitosos, como la familia de gafas Meta Quest y las Ray-Ban Meta, desarrolladas en colaboración con EssilorLuxottica. Además, es el laboratorio donde se está construyendo, literalmente, el futuro de la compañía.
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El año pasado se mostró por primera vez el prototipo Orion, unas gafas de realidad aumentada que, según Zuckerberg, podrían en el futuro reemplazar al smartphone tal y como lo conocemos. Estas gafas Orion son más grandes y robustas que las Ray-Ban Meta, probablemente debido a los componentes internos necesarios para proyectar imágenes. Incorporan proyectores Micro LED que pueden superponer información en el mundo real. Con Orion, Meta busca transformar el entorno físico en una plataforma para aplicaciones en 2D y 3D. Ofrece una experiencia totalmente nueva a sus usuarios.
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Además, Reality Labs se encuentra desarrollando gafas que sean potentes, livianas y asequibles. Este esfuerzo, evidentemente, requiere un gran trabajo. En cuanto a la visualización, la meta es lograr una experiencia casi indistinguible de la realidad. No basta con integrar pantallas de alta resolución en las gafas de próxima generación. También es crucial innovar en tecnologías que aún no existen para adaptarse al sistema visual humano. Esto representa un desafío significativo para los ingenieros y desarrolladores de Meta.
La empresa también está explorando nuevas interfaces, como las basadas en electromiografía, que permiten controlar dispositivos a través de señales neuromusculares. Meta reconoce que su objetivo es desarrollar productos que no estarán disponibles a corto plazo. Alcanzarán su máximo esplendor “en la próxima década”. Con el avance de la inteligencia artificial (IA), un campo en el que Meta está invirtiendo miles de millones, veremos cómo se integrarán estos desarrollos con su visión del metaverso. Esto creará un ecosistema tecnológico aún más avanzado.