Por Juan F. Peraza
La publicidad en línea también destaca como una tendencia prometedora
Merece la pena seguir apostando por valores tecnológicos? Es la pregunta que se hacen muchos inversores a la hora de decidir si incorporar este tipo de activos a sus carteras en un momento en el que las valoraciones de sus integrantes están muy por debajo del máximo que marcaron durante la pandemia. Sin embargo, en el sector ha surgido un “nuevo entusiasmo” que impulsará los beneficios de las empresas tanto a corto plazo como en el futuro: la inteligencia artificial (IA).
“La IA parece tener beneficios económicos positivos a corto plazo en todo el sector, frente al ‘hype’ o gran expectación de otras tendencias recientes”, señala David Older, responsable de renta variable de Carmignac.
La importancia de la irrupción de esta tecnología es comparable, según el experto, con el momento en el que se presentó el iPhone más que a un posible ‘bluf’, como el que hasta la fecha han sido el metaverso, el Internet de las Cosas, la conducción autónoma y la tecnología de cadena de bloques o blockchain.
“La mayoría de las grandes empresas tecnológicas ya están realizando importantes inversiones para aprovechar las oportunidades que ofrece la IA“, afirma.
En comparación con las tendencias anteriores, lo que cambia las reglas del juego es que “la oportunidad de ingresos vinculada a la IA podría materializarse muy rápidamente, como ilustra el lanzamiento por parte de Microsoft de varios productos ya habilitados con esta tecnología”, destaca Older.
En este sentido, cree que la explosión de la inteligencia artificial beneficiará a las empresas dedicadas a la potencia de computación y de la nube.
“La infraestructura en la nube (Microsoft Azure, Amazon AWS, Google, Oracle) y los proveedores de potencia de computación (Nvidia, AMD) también podrían ver grandes oportunidades en la IA”, estima el experto de Carmignac.