por Mauricio González
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Meta se preparaba para avanzar en su misión de mantenerse a la vanguardia de la inteligencia artificial (IA). La empresa, conocida por productos como Instagram, Meta Quest Pro y Llama 3, tenía planeado alimentar uno de sus próximos centros de datos con energía nuclear. Esto era un paso lógico, considerando que rivales como Amazon, Google y Microsoft están siguiendo una estrategia similar.
No obstante, los planes de Mark Zuckerberg enfrentaron un contratiempo inesperado. Aunque no hay información oficial, fuentes del Financial Times informan que se descubrió una especie rara de abeja en el área prevista para el proyecto. Además, el periódico estadounidense menciona que la empresa ha tenido que lidiar con “múltiples complicaciones”, lo que ha retrasado el progreso del proyecto considerablemente.
Meta buscaba adquirir energía de una planta ya operativa
De acuerdo con fuentes cercanas al asunto, Meta planeaba llegar a un acuerdo con el operador de una planta nuclear existente para adquirir energía. Amazon, por ejemplo, está implementando una estrategia similar con Talen Energy, un operador en Pensilvania. Sin embargo, esta decisión implica ciertas condiciones, como la proximidad del centro de datos a la planta nuclear.
El primer obstáculo para el gigante de las redes sociales surge aquí. El terreno junto a la central nuclear, donde se planeaba instalar la infraestructura tecnológica avanzada, que podría incluir cientos o miles de unidades de procesamiento gráfico, es el hábitat de una especie rara de abeja. Según las fuentes consultadas, este descubrimiento ha complicado el plan original de Meta, que ahora debe enfrentarse a una serie de desafíos ambientales y regulatorios. En consecuencia, el proyecto se encuentra en una situación incierta.
Actualmente, no está claro si Meta continúa con el proyecto mencionado o si ha optado por buscar alternativas menos problemáticas. Se rumorea que la empresa está explorando varios acuerdos para suministrar energía a sus centros de datos a partir de fuentes con bajas emisiones de carbono. Sin embargo, la energía nuclear no es la única opción que están considerando.
La energía nuclear surge como una opción atractiva para los gigantes tecnológicos por sus múltiples ventajas clave. Es capaz de proporcionar grandes cantidades de energía sin perjudicar sus metas ambientales a corto y mediano plazo, metas que, por cierto, se establecieron antes del auge de la inteligencia artificial. Este enfoque les permite mantener sus compromisos ecológicos mientras avanzan en el desarrollo de nuevas tecnologías.
